A principios de este mes hablamos de cómo modificar las dos versiones de la Postura del Niño (Balasana). Hoy quiero compartir algunos de los beneficios que estoy seguro que experimentas al hacer las posturas pero que quizás no conozcas desde un punto de vista académico.
Si alguna vez has tomado una clase de yoga, entonces sabes de primera mano que el yoga en general es increíblemente beneficioso. Sin embargo, cada postura ofrece sus propios beneficios únicos para nosotros como practicantes, y la postura del niño no es una excepción. Aquí están algunos de los principales beneficios de la Postura del Niño. Como verás, hay un poco de algo para todos en esta pose.
10 beneficios de la postura del niño:
- Ayuda a liberar la tensión en la espalda, los hombros y el pecho
- Estira las caderas, los muslos y los tobillos
- Estira los músculos, los tendones y los ligamentos de las rodillas
- Permitir que la frente (el chakra del tercer ojo) descanse en el suelo tiene un efecto calmante y tranquilizador en el cerebro. Como tal, no sólo calma la mente, sino que también ayuda a aliviar el estrés y la ansiedad
- Ayuda a normalizar la respiración y el flujo sanguíneo en el cuerpo
- Alargamiento y estiramiento de la columna vertebral
- Ayuda a aliviar el dolor de espalda baja y cuello cuando se hace con puntales de forma apoyada
- Flexiona y masajea muchos de los órganos internos
- Cuando se hace con las rodillas juntas y el torso apoyado en los muslos, ayuda a tu digestión
- Es una postura recomendada para aquellos con mareos y/o fatiga
Así que, independientemente de la versión de la postura del niño que elijas, o del motivo por el que hagas la postura del niño, los beneficios son muchos. Y recuerda, no tienes que esperar a nuestra próxima clase de yoga para disfrutar de los beneficios de la postura del niño. Es una gran manera de empezar o terminar tu día, así como una poderosa manera de combatir el estrés a lo largo de tus días.
¡Namaste!