La serie de Oxygen «The Real Murders of Orange County» narra algunos de los casos más espeluznantes que han sacudido a la rica comunidad costera del sur de California, desde asesinatos por encargo hasta familias que se enfrentan entre sí. Y su episodio, ‘Spoiled to Death’, no es diferente. Según su sinopsis oficial: «La familia Sachs parece estar viviendo la vida de OC en su mansión en la cima de la colina cuando su familia es repentinamente destrozada por un vicioso tiroteo en medio de la noche. Los investigadores revelan una sorprendente lista de enemigos que tenían a las víctimas en el punto de mira». Pero al final, fue Ashton Sachs, su propio hijo, quien se volvió contra ellos.
¿Quién es Ashton Sachs?
En 2014, parecía que Ashton Sachs, de 19 años, llevaba una buena vida. Crecía en una mansión con vistas al mar, gracias al imperio inmobiliario de su madre, Andra, valorado en 80 millones de dólares, y asistía a un colegio comunitario en Seattle, Washington. Sin embargo, no era para nada así. Estaba deprimido y culpaba a sus padres de su «vida desordenada». Pero en lugar de ir a terapia por ello, malgastaba sus días fumando marihuana y jugando a los videojuegos, sin asistir nunca a las clases. Y así, a principios de febrero, decidió matar a su familia y luego a sí mismo. Condujo hacia el sur durante unas 20 horas, se sentó en la oscuridad en un edificio comercial que poseía su madre durante un largo rato, y luego condujo a su casa, a la mansión.
El 9 de febrero, alrededor de las 2 de la madrugada, Ashton entró en su casa por una puerta sin cerrar, llevando un rifle automático del calibre 22 y una caja llena de munición. Posteriormente, visitó la habitación de sus padres y, mientras dormían, acribilló sus cuerpos a balazos. Entre los dos tenían 15 heridas de bala. Ashton incluso fue a la habitación de su hermano de 8 años para darle el mismo tratamiento y también disparó una vez a su hermana menor. Después, cogió un taxi hasta el aeropuerto más cercano y estaba de vuelta en Seattle para cuando se encontró a su familia. El caso es que Ashton interpretó bien el papel de familiar angustiado, uniendo fuerzas con su hermano mayor, Myles, para conseguir la custodia de sus hermanos y sollozando en el funeral de sus padres.
Al principio, Ashton «ayudó» a los investigadores y echó más leña al fuego de sus especulaciones de que los asesinatos eran el resultado de un turbio negocio o quizás de una disputa legal que salió mal. Pero cuando decidieron mirar un poco más de cerca a la familia y las pruebas empezaron a acumularse contra él, fue evidente que era el responsable. Así, el 6 de marzo de 2014, tras una intensa investigación de un mes, los agentes de la Unidad de Homicidios del Sheriff del Condado de Orange detuvieron a Ashton en la zona de San Diego para llevarlo a un interrogatorio, donde confesó todo. En consecuencia, fue arrestado por cargos de asesinato.
¿Dónde está Ashton Sachs ahora?
En un principio, en mayo de 2014, Ashton Sachs se declaró inocente de los cargos que se le imputaban. Pero más tarde, debido a todas las pruebas en su contra: el descubrimiento del arma homicida en su coche, sus registros telefónicos que lo situaban en el lugar de los hechos en el momento de los disparos, y la cantidad de artículos de Wikipedia en su teléfono que describían los grados de asesinato, intento de asesinato y delito grave, y la defensa por locura, el 20 de septiembre, en una audiencia especial, aceptó un acuerdo de declaración. Ashton admitió su culpabilidad por dos cargos de asesinato en primer grado (por cada uno de sus padres) y dos cargos de intento de asesinato (por disparar contra sus hermanos, a causa de lo cual su hermano, que entonces tenía 8 años, quedó paralizado del pecho para abajo).
Ashton Sachs fue condenado a cuatro cadenas perpetuas consecutivas más más de 100 años por penas adicionales sin posibilidades de libertad condicional. Se le ofreció la oportunidad de hacer una declaración en su audiencia de sentencia, pero se negó, siendo llevado tranquilamente a su vida tras las rejas. Por lo tanto, hoy, según los registros del Departamento Correccional de California, Ashton Sachs, a la edad de 26 años, está encarcelado en la prisión de mínima a máxima seguridad de 640 acres, la prisión estatal de Pleasant Valley, en Coalinga, en el condado de Fresno, donde permanecerá el resto de su vida natural. A lo largo de los años, siempre que se le ha preguntado a Ashton por qué hizo lo que hizo, su respuesta ha sido la misma: «No lo sé»
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