Espectáculo de piratas en Cancún

La icónica imagen del curtido perro de mar y su loro de confianza se hizo famosa por el Long John Silver de Robert Louis Stevenson en La isla del tesoro, pero ¿había algo de cierto en este mito de que los piratas iban acompañados de loros? Es muy posible entender por qué los piratas podrían tener otras mascotas; un gato, por ejemplo, para mantener las ratas y los ratones bajo control, pero ¿por qué querrían los piratas un loro?

Razón por la que los piratas podrían tener un loro como mascota

Bueno, la razón es en parte monetaria, como cabría esperar de los piratas, pero también tenía que ver con el estatus. Los bucaneros que viajaban a los trópicos solían traer a casa animales y plantas exóticas que eran muy demandadas en las capitales europeas. Los loros, en particular los guacamayos, eran muy valiosos por su inteligencia y belleza. Hay más de 300 especies de estas inteligentes criaturas que se encuentran en el Caribe; las más pequeñas miden alrededor de 3 pulgadas y las más grandes llegan a medir 33 pulgadas, aunque no todas estas especies son capaces de imitar el habla.

Aquí hay una lista de las principales razones que tenían los piratas para mantener a los loros como mascotas, en lugar de como carga, durante la Edad de Oro de la Piratería:

– No comen mucho lo que significa que, al igual que los gatos, son mascotas de bajo mantenimiento cuando las reservas de alimentos comienzan a agotarse.

– No hay mucha carne en ellos por lo que las posibilidades de que los tripulantes traten de comerlos cuando no hay suficiente comida a bordo.

– Eran valiosos, y como tal un símbolo de estatus y éxito.

– Muchas especies son muy sociables y les gusta la gente por lo que no atacarían a la tripulación.

– Se les puede enseñar trucos con tiempo y cuidado lo que ayudaría a pasar el tiempo durante un largo y aburrido viaje.

– No corren peligro de caerse por la borda y ahogarse con el oleaje.

– Pueden hacerte compañía, aunque no siempre digan lo correcto.

– Son capaces de protegerse durante una pelea saliendo volando o subiendo a las jarcias.

Así que, como ves, los loros eran los compañeros perfectos para los piratas de importación y habilidad.

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