Martes, 8 de marzo de 2016 (HealthDay News) — Los suplementos de vitamina D no aliviaron el dolor ni ralentizaron la progresión de la osteoartritis de rodilla en un nuevo estudio, a pesar de que los pacientes implicados tenían niveles bajos de la vitamina.
La osteoartritis es una enfermedad progresiva, y actualmente no existe ningún tratamiento que detenga la pérdida de cartílago. Con el tiempo, muchos pacientes se ven abocados a la implantación de prótesis de rodilla, según los investigadores australianos.
«Estos datos sugieren una falta de pruebas que respalden la administración de suplementos de vitamina D para ralentizar la progresión de la enfermedad o el cambio estructural en la osteoartritis de rodilla», dijo el investigador principal, el doctor Changhai Ding, profesor de la Universidad de Tasmania en Hobart.
El uso de suplementos de vitamina D para reducir el dolor y ralentizar la progresión de la osteoartritis de rodilla ha sido controvertido en el pasado, con estudios que mostraban resultados contradictorios, dijo.
Este nuevo estudio puso a prueba los suplementos de vitamina D asignando al azar a algunos enfermos de osteoartritis para que recibieran suplementos mientras que otros recibieron un placebo. En el contexto de este tipo de estudio definitivo, la vitamina D no logró tener ningún efecto beneficioso, descubrió el equipo de Ding.
La artrosis de rodilla afecta a alrededor del 10 por ciento de los hombres y al 13 por ciento de las mujeres de 60 años o más, según la información de fondo del informe. El estudio se publicó en el número del 8 de marzo de la revista Journal of the American Medical Association.
Los hallazgos del estudio no sorprendieron al doctor Neil Roth, cirujano ortopédico del Hospital Lenox Hill de la ciudad de Nueva York.
«La osteoartritis es una enfermedad progresiva y cualquier medicamento que tomen los pacientes, por vía oral o inyectado, no alterará la enfermedad», dijo. «Lo mejor que podemos hacer sin una sustitución de la articulación es modificar algunos de los síntomas»
Estos tratamientos incluyen medicamentos antiinflamatorios, analgésicos e inyecciones de cortisona, dijo. Estas terapias no impiden que la enfermedad empeore y sólo alivian algunos de los síntomas, dijo Roth.
Para el estudio, Ding y sus colegas asignaron aleatoriamente a algo más de 400 pacientes con osteoartritis de rodilla y niveles bajos de vitamina D a un tratamiento mensual con 50.000 unidades internacionales de vitamina D al mes o un placebo.