Vida temprana
Blackstone fue el cuarto hijo póstumo de Charles Blackstone, un comerciante de seda de medios moderados. Su madre murió cuando Blackstone tenía 12 años. Fue educado por su tío Thomas Bigg, un cirujano londinense, primero en la Charterhouse (1730-38) y luego en el Pembroke College de Oxford, donde leyó no sólo los clásicos sino también lógica y matemáticas. Todo lo que escribió demuestra un amplio conocimiento de la literatura y un estilo literario alusivo y elegante.
En 1741 ingresó como estudiante en el Middle Temple, uno de los Inns of Court. En 1743 fue elegido miembro del All Souls College de Oxford; un año más tarde se convirtió en fellow, y en 1746 ya era abogado. Aunque su práctica no tuvo mucho éxito, en los asuntos del colegio demostró enseguida ser un hombre de negocios activo y eficiente, celoso del orden y la mejora.
En 1750 Blackstone obtuvo el título de Doctor en Derecho Civil. En julio de 1753 decidió retirarse de su práctica y concentrarse en la enseñanza del derecho académico y en la realización de trabajos legales en Oxford y sus alrededores. Había sido registrador de Wallingford desde 1749 y asesor (juez) del Tribunal del Canciller desde 1751.
Blackstone había desarrollado un gran interés por el derecho común, y en 1753 comenzó a dar conferencias sobre ese tema. Fueron las primeras conferencias sobre derecho inglés impartidas en una universidad. Sus oyentes quedaron cautivados por la lucidez y el encanto de su estilo y por la sencillez con la que presentaba el tema. Esta última virtud, sin embargo, se logró en parte porque Blackstone desdibujó las dificultades y contradicciones del derecho inglés. Dio a todo el tema un aire de integridad e interdependencia mutua, como si se tratara de un sistema lógico uniforme, y suprimió o ignoró sus aspectos arcaicos y, en su lugar, aclamó el derecho inglés como la encarnación de la sabiduría del siglo XVIII. Enunció sus objetivos en un anuncio de sus conferencias fechado el 23 de junio de 1753:
Se propone establecer un plan general y completo de las leyes de Inglaterra; deducir su historia; aplicar e ilustrar sus principales reglas y principios fundamentales; y compararlas con las leyes de la naturaleza y de otras naciones.