La hipocondría no se entiende bien
Barsky dice a WebMD que la causa de la hipocondría no se entiende bien, pero puede ser el resultado de acontecimientos de la infancia, como cuando un padre enferma o muere. «Cuando llegan a esa edad en la que su padre murió de una enfermedad cardíaca, sienten una presión en el pecho», dice.
Actualmente, se utilizan otros tipos de terapia y antidepresivos para tratar a los hipocondríacos. «La psicoterapia tradicional no parece ser eficaz», dice Barsky. «Algunos estudios preliminares sugieren que los fármacos podrían ser útiles, pero el uso de antidepresivos no se ha estudiado aún de forma rigurosa.»
Pero las ramificaciones de su estudio podrían ser enormes. Se calcula que el 15% de todos los costes sanitarios corresponde a la evaluación de personas que sienten síntomas físicos pero no tienen ninguna enfermedad médica diagnosticable, afirma Barsky. Sin embargo, no todos estos pacientes son hipocondríacos.
«Lo interesante y valioso del estudio del doctor Barsky es que ha descubierto que se puede utilizar una forma de psicoterapia estructurada para cambiar la forma de pensar de las personas. Al cambiar su forma de pensar, les ayuda a entender sus síntomas de una manera diferente, y a no estar tan asustados por ellos», dice el doctor Steven Locke, otro psiquiatra de Harvard que ha estudiado las opciones de tratamiento de la hipocondría. «Cuando su miedo y ansiedad asociados a los síntomas disminuyen, los propios síntomas tienden a disminuir porque el sistema nervioso se calma».
Locke no participó en el estudio de Barsky, pero su propia investigación muestra los beneficios de la terapia en aquellos con síntomas inexplicables desde el punto de vista médico. En un estudio, Locke descubrió que los síntomas -junto con los niveles de ansiedad- disminuyeron notablemente en un grupo de pacientes hipocondríacos que se sometieron a seis semanas de terapia de grupo en un aula. «Lo que utilizamos tenía elementos de terapia cognitiva conductual», dice a WebMD. «Y fue clínicamente eficaz»
En otro estudio, Locke afirma que los pacientes que tenían síntomas médicamente inexplicables pero que no habían sido diagnosticados como hipocondríacos se habían ahorrado una media de 1.000 dólares en costes médicos un año después de someterse a esta terapia.
Aún así, a pesar de estos prometedores resultados – «niveles significativamente más bajos de síntomas, creencias y actitudes hipocondríacas y de ansiedad relacionada con la salud» entre los pacientes que recibieron terapia cognitiva conductual-, queda una importante cuestión: