Paz interior

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Encontrar fuentes: «Inner peace» – news – newspapers – books – scholar – JSTOR (October 2007) (Learn how and when to remove this template message)

La paz interior (o paz mental) se refiere a un estado deliberado de calma psicológica o espiritual a pesar de la presencia potencial de factores de estrés como la carga que surge de pretender ser otra persona podría interrumpir la paz interior. Muchos consideran que estar «en paz» es saludable (homeostasis) y lo contrario a estar estresado o ansioso, y se considera un estado en el que nuestra mente rinde a un nivel óptimo con un resultado positivo. Por lo tanto, la paz mental se asocia generalmente con la dicha, la felicidad y la satisfacción.

La paz mental, la serenidad y la calma son descripciones de una disposición libre de los efectos del estrés. En algunas culturas, la paz interior se considera un estado de conciencia o iluminación que puede cultivarse mediante diversas formas de entrenamiento, como los ejercicios de respiración, la oración, la meditación, el tai chi o el yoga, por ejemplo. Muchas prácticas espirituales se refieren a esta paz como una experiencia de conocimiento de uno mismo.

Las personas tienen dificultades para abrazar su espiritualidad interior porque los factores estresantes del día a día les superan; encontrar la paz y la felicidad en las pequeñas alegrías de la vida puede parecer difícil, y los resultados no parecen tan gratificantes. Alcanzar la espiritualidad es un proceso paso a paso; hay formas en las que uno puede volverse más espiritual cada día.

Tenzin Gyatso, el actual y decimocuarto Dalai Lama, destaca la importancia de la paz interior en el mundo:

La cuestión de la paz mundial real y duradera concierne a los seres humanos, por lo que los sentimientos humanos básicos también están en sus raíces. A través de la paz interior, se puede lograr una auténtica paz mundial. En este sentido, la importancia de la responsabilidad individual es bastante clara; primero hay que crear una atmósfera de paz dentro de nosotros mismos, y luego ampliarla gradualmente para incluir a nuestras familias, nuestras comunidades y, en última instancia, a todo el planeta.

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