5 pasos para tener un buen sexo en tu primera vez

Así que has decidido dar el paso y tener sexo por primera vez?

Sabemos que la idea de «perderlo» puede ser angustiosa, pero esto no tiene por qué quitarte el placer de tener sexo. Tanto si eres heterosexual, como si eres gay o algo intermedio, tenemos algunos consejos que te ayudarán a que tu primera vez sea divertida y agradable.

1. ¡Prepárate!

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Esto puede parecer una obviedad, pero realmente es el punto más importante de todos. Estás preparado?

El sexo -más allá de ser una actividad física y completamente natural- es una actividad emocional también. Los nervios pueden apoderarse de ti o de tu pareja, y es totalmente normal sentirse un poco abrumado.

Si estás nervioso, tómate un minuto para pensar si esto es lo que quieres en este momento, que no te sientes presionado y que es con alguien en quien confías.

Puede que sientas muchas expectativas relacionadas con el sexo, pero seamos sinceros: a menudo no está a la altura en la primera vez. Puede ser difícil saber por dónde va todo, puede doler un poco o incluso terminar antes de que te des cuenta.

Aunque sentirse emocionalmente preparado es esencial, estar preparado con protección hará maravillas para tranquilizar tu mente y aumentar el disfrute. Junto con el uso de preservativos para protegeros de las infecciones de transmisión sexual (ITS) y de los embarazos no deseados, un poco de lubricante a base de agua ayudará a que las cosas vayan un poco más fluidas.

Nuestra sección sobre preservativos os enseñará a ambos a utilizarlos.

2. Consentimiento

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No hay nada más placentero que asegurarse de que los dos miembros de la pareja realmente quieren tener sexo.

Sigue hablando con tu pareja, hazle saber cómo te sientes, qué funciona y qué no. No pasa nada por cambiar de opinión, y si en algún momento alguno de los dos se siente incómodo, tómate un respiro y vuelve a intentarlo cuando ambos estéis preparados.

Recuerda que si uno de los miembros de la pareja está borracho o se siente presionado, esto tampoco cuenta como «consentimiento». Lo mejor es comunicarse. Preguntaros mutuamente cómo os sentís por el camino y esto es algo fácil de tachar de la lista de formas de disfrutar del sexo.

3. Conocer los diferentes tipos de sexo

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El sexo es el sexo, ¿verdad? Pues no, en realidad no. El sexo puede significar diferentes cosas para diferentes personas y hay unas cuantas formas diferentes de «tener sexo».

El sexo oral, por ejemplo, es cuando usas tu boca para lamer y chupar los genitales de la otra persona. El sexo vaginal se refiere al sexo en el que el pene entra en la vagina, y el sexo anal se refiere a cuando el pene entra en el ano. Sin embargo, cuando la gente habla de «tener sexo por primera vez», se refiere a tener sexo vaginal o anal.

Si bien la mecánica de todos ellos puede ser un poco diferente, la preparación, no es tan diferente (no se preocupe, vea el siguiente punto para obtener más información sobre esto).

Sea cual sea la experiencia que elija para su primera vez, tenga en cuenta que los condones son la única manera de protegerse al 100% del VIH, las ITS y los embarazos no deseados. Consulta nuestras páginas sobre cómo tener sexo para obtener más consejos sobre la protección.

4. ¡Juego previo, juego previo, juego previo!

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En el período previo a tu primera vez, puede que pases mucho tiempo preocupándote por el «resultado final». Aunque esto es natural, dedicar todo el tiempo posible a los juegos preliminares puede ayudaros a ti y a tu pareja a disfrutar del sexo y a reducir el riesgo de que os duela la primera vez.

Los juegos preliminares son todo aquello que os ayuda a ti y a tu pareja a estar bien «excitados» antes de tener sexo con penetración. Besa, siente, lame y estimula a tu pareja tanto como sea posible para que te sientas dentro de ella y preparada para el siguiente paso.

Esto también facilita la mecánica del sexo. Si un hombre está excitado, su pene debe estar erecto para que pueda entrar más fácilmente en el ano o en la vagina, dependiendo del tipo de sexo que estén teniendo. Las mujeres se excitan cuando están «mojadas» ahí abajo, lo que actúa como un lubricante natural para que el pene pueda deslizarse dentro más fácilmente.

El sexo anal es siempre un poco más fácil cuando se tiene mucho lubricante a mano – sólo asegúrese de que es un lubricante a base de agua, ya que un lubricante a base de aceite puede hacer que los condones se rompan.

Además, un pequeño secreto divertido, ¡no se necesita el sexo para llegar al orgasmo (correrse)! De hecho, mucha gente no llega al sexo con penetración porque se divierte demasiado por el camino.

5. HABLAD entre vosotros

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¡El sexo debe ser divertido! Una forma de asegurar que esto ocurra es mantener la comunicación con tu pareja.

Algunas cosas pueden no sentirse bien – por lo que puedes querer que vayan más despacio o se detengan. ¡Otras cosas pueden sentirse increíbles y puedes querer que tu pareja siga haciendo esas cosas! Puede que te guste que tu pareja te toque en una zona concreta, puede que lo prefieras lento, o rápido… pero ¿cómo lo van a saber si no se lo comunicas de alguna manera?

Usa pistas físicas: gime ligeramente, dale una sonrisa cómplice o susúrrale al oído. O simplemente puedes decir: «¡Sí, más de eso, por favor!»
Entiendes lo que queremos decir.

La mayoría de las veces, a tu pareja le ENCANTARÁ el hecho de que te esté excitando de alguna manera, y eso le excitará más. Así que hazle saber cómo te sientes, y pídele que haga lo mismo.

Ya sea la primera vez que tienes sexo, o la centésima, cada vez puedes querer algo diferente, así que hablar es la mejor manera de conseguirlo!

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